No sólo de hamburguesas vive el hombre. 

En un mundo de comida rápida, dónde existe tanta variedad deliciosa, aunque no sea saludable, todos queremos comernos una rica y jugosa hamburguesa, una pizza, espagueti, o si eres más regional, alguna rica comida típica de tu país, por ejemplo: pupusas, tacos, arepas y cualquier comida deliciosa que se come en nuestros pueblos. Nos encanta tomarnos un tiempo y disfrutar nuestros sabrosos alimentos. ¡Qué bendición!

Una Pausa necesaria. Explicación. 

Ocupar ese espacio dentro de nuestro día, para disfrutar de esos alimentos sabrosos es lo máximo, es nuestro escape al trabajo, nuestra pausa para refrescar la mente y el cuerpo. Dios es tan perfecto que sabía que como seres humanos no podríamos trabajar 8 o más horas de corrido, porque tendríamos más problemas de estrés, del que manejamos, es por eso que nos dio momentos especiales, por lo menos tres veces al día sino es que más, para comer, tomarte un tiempo para relajante y en donde se liberan ciertas sustancias en nuestro cuerpo que nos traen sentimientos agradables a nuestro día a día.

¿Te imaginas como sería un día sin tus tiempos de comida?

¿Verdad que se lee aterrador? Pensar que tendríamos que trabajar de corrido, y no tomarnos determinados momentos para alimentarnos, quizá podríamos hacer una comida al día, quizás al despertarnos, pero no más. El no tener ese momento especial para saciar tu hambre, y donde se degustan esos platillos tan deliciosos, nos haría explotar la cabeza de tanto trajín.

¿Y la comida espiritual?

Has pensado que, así como alimentamos nuestro organismo, también necesitamos alimentar nuestro espíritu... Muchos solo lo alimentan una vez a la semana: llegar a sentarse el domingo, entonar algunos cantos, escuchar al pastor predicando y dar ofrenda, no es suficiente para alimentar tu ser interior.

Algunos por motivo de ocupaciones únicamente tomamos uno o dos tiempos en el día para buscar al Señor, y muchas veces corriendo, porque nos levantamos tarde, o porque ya tenemos sueño. 

Bien alimentados externamente, pero desnutridos de espíritu.

A veces nuestro cuerpo se ve mucho mejor de lo que se vería nuestro espíritu, ¿recuerdas el tema de acerca de la Ansiedad?  Sino lo leíste, no te preocupes puedes tomarte un tiempo para hacerlo. En ese tema hablamos de que existen dos naturalezas, una espiritual y una material, Romanos 7:25, el problema es que a veces nos ocupamos únicamente de la naturaleza material, y por lo tanto esta se hace más fuerte, y nuestro espíritu va menguando, y allí es donde vienen situaciones como la ansiedad, depresión, estrés, entre muchas otras cosas que entristecen nuestra alma y limitan la relación con Dios.

3 veces al día. 

¿Te recuerdas de Daniel y la historia del foso de los leones? En esa historia se nos muestra que el oraba 3 veces al día Daniel 6:10, un buen número de veces para tener comunión con Dios. Entonces quiero lanzarte un reto a la acción, que te parece si durante el día tomas tres momentos específicos para:

1. Leer la palabra de Dios, puede ser solo un versículo (o puedes en uno de esos 3 tiempos leer nuestra reflexión bíblica, no te toma más de 5 minutos)
2. Medita en el versículo que leíste, tomate unos minutos y analiza ¿Cuál es la lección, que puedes aprender de ese versículo? 
3. Realizar una oración de 5 minutos máximo (ojo que no se vale simplemente agradecer por tus alimentos) planifica con anterioridad en tu mente, un  agradecimiento, una alabanza y si lo deseas una petición, así tendrás un objetivo en tu oración.

15 Minutos 

En resumen, no son más de 15 minutos por tiempo y por ejemplo si tienes una hora de almuerzo en tu trabajo, puedes comer en 45 minutos, y leer el versículo en tu celular, analizarlo, y orar en 15 minutos máximo. 

¿Ves que no tiene que ser un gran tiempo el que necesitas para alimentar tu espíritu? Eso sí, toma un tiempo en tu mente para preparar tu oración y el versículo que vas a leer para así dedicarte específicamente a buscar de Dios. 

La Conclusión en Reflexiones Bíblicas. 

En conclusión, con esta explicación de Mateo 4:4, queremos animarte a que alimentes tu espíritu de la misma forma en que necesitas comida para tu cuerpo, y verás como las bendiciones de buscar a Dios se manifiestan en tu vida. 

Esperamos que este bosquejo o explicación sea de bendición para tu vida, agradecemos que puedas compartirla, y recuerda que todos los días aquí encontrarás reflexiones bíblicas para ti, que Dios te bendiga.