1 Alzaré mis ojos a los montes; ¿De dónde vendrá mi socorro?
2 Mi socorro viene de Jehová, que hizo los cielos y la tierra.
Salmos 121:1-2 RVR1960
Un grito de Esperanza.
En el primer versículo podemos ver un llamado de auxilio, un llamado
desesperado por encontrar ayuda. Pero ojo, no es ayuda a cualquier lugar,
ni a cualquiera que escuche, sus ojos los enfoca a un punto especifico, a
lo alto, a los montes, no mira a cualquier lugar sin saber a dónde acudir
y a quien buscar, si bien él dice ¿De dónde vendrá mi socorro? En el
segundo versículo da la respuesta contundente, certera y definitiva,
diciendo que su socorro viene de Jehová, y aún le da más énfasis al
aclarar, que es Jehová el que hizo los cielos y la tierra, porque él no
buscaba la ayuda de la creación, sino buscó al Creador.
En medio de la angustia vendrá nuestro socorro.
El salmista da un grito por ayuda, pero es un Grito de Esperanza, un
grito con fe, que sabe que Dios escuchará, que acudirá a él, que irá a su
rescate. El escritor de este salmo sabia con plena certeza que su
esperanza estaba en Jehová, él no pide ayuda con desconsuelo y
desesperanza sin saber si sería escuchado. Sino con pleno conocimiento de
que su Dios el creador de todo lo que existe, acudiría en su auxilio.
En la actualidad.
Durante las pruebas duras de la vida, en los episodios de lucha y
desesperanza, es a nuestro Dios a quien debemos de ir, de acudir con
confianza, con fe, así como lo hizo el salmista, que sabía con certeza de
que Dios de los cielos estaba presto a brindarle el socorro oportuno.
La Conclusión de esta reflexión bíblica.
Hermanos, no olvidemos que Dios esta atento a nuestras suplicas o nuestro
grito, a nuestra necesidad. Si tiene que gritar por auxilio, hágalo, grite
hermano, grite, pero hágalo con Esperanza, acuda con fe, sabiendo que Dios
el magnífico creador, le escucha y le ayuda. Él le guardará y ayudará,
pues no solo se interesa de su bienestar actual, recuerde que nuestra vida
y nuestras circunstancias no solo son mientras nuestro cuerpo viva, toda
nuestra vida está diseñada con un plan, con un plan eterno de vida, de
rescate y redención, por medio de nuestro señor Jesucristo.
Esperamos que esta reflexión bíblica sea de bendición para tu vida, agradecemos que puedas compartirla, que Dios te bendiga.
